Hawking, uno de los físicos más grandes disfrutando un breve momento de ingravidez. |
A lo largo de la
historia, miles de pensadores, científicos, filósofos, artistas, escritores,
atolondrados y todo tipo de gente, se han planteado la pregunta de si se puede
viajar en el tiempo. Einstein de alguna manera demostró, para nuestra época,
que el tiempo es relativo. Más recientemente, pensadores de la talla de Stephen
Hawking han tratado de profundizar en estos estudios y han llegado a la conclusión
de que el viaje al pasado no es probable por paradojas como la del científico
loco que se dispararía a si mismo desde el otro lado del tiempo una vez que
atravesara el Agujero de Gusano (ultramicroscópica irregularidad temporal que
conecta dimensiones y tiempos diferentes) o porque si se pudiera agrandar uno
de estos agujeros, la retroalimentación radioactiva lo destruiría y destruiría
el mundo circundante o cosas así.
Desde mi humilde opinión de médico, por ende,
estudioso de la biología humana y la vida, de una manera u otra y desde mi más
humilde posición de aficionado de la física y la filosofía y sin querer
compararme con nadie, mucho menos con estos súper genios, quiero decir que al
pasado no se puede viajar y punto, lo siento por los relativistas y los
matemáticos si se insultan pero no creo que ni lleguen a preocuparse por lo que
digo si es que lo leen pero al pasado no se puede viajar y es absoluto.
No se puede ir al pasado por una razón muy
simple, no es por la retroalimentación radioactiva de los Agujeros de Gusano,
también llamados Puentes de Rosen-Einstein, ni ninguna otra cosa parecida, la
razón es más simple y es que el pasado no existe.
El tiempo en los seres vivos no existe
independiente del ser, no es algo que nos hace envejecer y morir. Envejecemos y morimos
porque es la naturaleza del organismo y lo que define al tiempo. Este tiempo
biológico no existe fuera del ente vivo, es un tiempo sometido por las leyes
biológicas del ser y existe porque existe vida. Si no existiera vida no existiría tiempo ni nada fuera importante, porque no habría cerebro para darse cuenta ni vida que marcara un tiempo.
Si quisiéramos o hipotéticamente
pudiéramos viajar al pasado a encontrarnos con Einstein mismo, oír cantar a
Gardel o conocer a Sara Montiel en los años cincuenta o como quería Hawking,
conocer a Marilyn Monroe, ¿Qué encontraríamos? ¿Estaría Sara cantando un cuplé
en su más sensual estilo o Einstein ensimismado en descubrir la fisión del
átomo? No, no es posible, ya desaparecieron esos cuerpos y no habitan otro
mundo, incluso, si creyéramos en la reencarnación, no reencarnarían en el mismo
periodo sino en el presente. No estamos eternamente repitiendo la misma historia una y otra vez
para que podamos satisfacer nuestra fantasía de viajar al pasado, no es una
obra de teatro. Sencillamente el pasado que conocemos, conocimos, no existe materialmente
y ni abriendo todos los puentes de Rosen-Einstein del mundo lo volveremos a
vivir. No existe.
Quizás pudiéramos ver el pasado como quien ve
una película, porque irradiamos luz y la luz viaja y si esta se mantiene organizada
y tuviésemos los sensores adecuados, esta podría ser una posibilidad, pero no
podemos volver a vivir algo que no existe más.
Esa es mi opinión.
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